martes, 25 de diciembre de 2012

El poder de(e)scribir

Suelo dejar de soñar, pero jamás mientras duermo. El problema es que no recuerdo. Puedo verme dormir y soñando, puedo ver que me veo durmiendo y soñando, puedo ver que me veo viéndome durmiendo y soñando. Escribir me permite también imaginar que sueño mientras estoy despierta, verme mientras escribo que me imagino que sueño mientras estoy despierta y ver que me veo escribiendo que me imagino que sueño todo el tiempo mientras estoy despierta.

martes, 18 de diciembre de 2012

Ahogo

El aire escaso y pétreo se impone
por las normas imposibles de tu física
hoy
quisiera no necesitarlo así.
Le servirá a los gusanos.

lunes, 17 de diciembre de 2012

Sólo para entendidos vitivinólocos:



Lancelot prefería merlot, aunque era lo único que se servía en Camelot.

Sarmiento gastaba fortuna en masajistas: estaba lleno de nudos.
También en el podólogo: le salía un sauvignon en invierno.
¿Cuál era la joya favorita de Sarmiento? Los zarcillos.

Una noche fue a un cavernet, lo recibieron de franc:
-Su(b)Va, ya que vino...
Pero se fue a dormir tempranillo.
Alguien le dijo: -¡C(s)epa Ud. que es una borgoña!
Y se quedó pensando: ¿Syrah cierto? Porque soy bastante bonarda.


domingo, 16 de diciembre de 2012

Cuidado con lo que deseas

No puedo con mi genio. He usado corchos cuya resistencia vencería al más fuerte de los sacacorchos. He procurado que la lámpara quedara oculta y lejos de cualquier frotamiento intencional o accidental. Pero siempre encuentra la manera de aparecerse y sugerirme que realice mis más variados deseos. Una y otra vez, luego de pensar en ellos, le pido que regrese a donde estaba.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Saber dónde

Me duelo en los huesos
en el sepulcro de la justicia,
al menos concédeme la muerte
para saber dónde derramarme.


martes, 11 de diciembre de 2012

El poeta de la plaza

Un indigente loco, en una plaza, me recitó algo de Neruda por unas monedas. El poeta buscó el vino; y yo, vestigios de mí en él.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Por el amor de dios, permítanme una pregunta

Si no le hubiesen puesto un nombre
y llevado en sus armas
y clavado en cada pensamiento
para hacer esclavos.

Si no le hubiesen puesto un nombre
que se compra con almas
que se vende con sangre
y se vive con espinas.

Si no le hubiesen puesto un nombre
más grande que los hombres
¿hoy seríamos iguales?

La voz

Si callas, algo muere; María.