
Es bueno replantearse la manera de vivir la única vida que tenemos disponible para usar. Se usa una vez y se tira. Y se vive al borde de la cornisa; si no lográs el equilibrio, la caída es inminente y posiblemente fatal. Saber que sólo disponemos del presente debería ser la clave para romper con tantas estructuras. E inevitablemente, la muerte está ahí, diciéndonos a cada momento que no nos olvidemos de vivir.